Ojalá hubiese dichos que jamás te viniesen a la cabeza, pero en ocasiones no puede evitarse. Dicen que lo que mal empieza, mal acaba y lamentablemente esta semana ha sido un fiel reflejo de esa frase popular en Francia.
A las 5 personas que murieron el pasado lunes por aludes, se suman otros 7 muertos después de otras 3 avalanchas que tuvieron lugar ayer sábado, de nuevo en los Alpes franceses.
En esta ocasión, los aludes tuvieron lugar en Val Thorens, Valloire y Bourg-Saint-Maurice. Lo triste es que ya se había alertado de que riesgo de avalancha era especialmente alto este fin de semana por la nieve caída recientemente sumada al importante aumento de temperaturas.
La primera de las avalanchas tuvo lugar alrededor de las 08:00 horas en el sector de Val Thorens: una joven de 30 años había quedado sepultada después de que la nieve cediera bajo sus pies.
Por suerte, un grupo de esquiadores que estaba cerca pudieron rescatarla y salvarle la vida. Cuando llegó el cuerpo de rescate la chica estaba en pie y consciente, pero fue evacuada al Centro Hospitalario Saint Jean de Maurienne.
Sobre las 11:15 la gendarmerie de Saboya recibió un nuevo aviso de avalancha que les llevó a Valloire, al Col du Galibier donde contaron con la colaboración de la gendarmería de Briançon.
Por el momento se sabe que ésta pilló a 5 excursionistas de los que 4 fallecieron y el quintó salió ileso.
Sobre las 15:00 horas tuvo lugar una tercera avalancha cerca de Bourg-Saint-Maurice bajo el Mont Pourri.
En esta ocasión, la gendarmería de Annecy y dragón 74 llegaron al lugar d ellos hecho antes que la gendarmería de Bourg de Saint Maurice pero solo pudieron registrar 3 nuevas víctimas.
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