Aprender freeride en Grandvalira

¿Quieres aprender freeride? Grandvalira te da una excelente oportunidad

Aprender freeride en Grandvalira

¿Quieres aprender freeride de una manera segura? Grandvalira te ofrece una excelente oportunidad si participas en el sorteo que comienza hoy mismo en su cuenta de Instagram. ¡Ojo el concurso solo dura 24 horas!

Hace ya un tiempo, antes del confinamiento tuve la oportunidad de asistir a uno de estos camps y mi experiencia fue fantástica. Una manera divertida, muy gratificante y segura de aprender freeride.

Os dejo a continuación el artículo que escribí entonces. ¡Mucha suerte para el concurso!

Freeride. Sin duda una de las palabras preferidas por los esquiadores. Al menos por los esquiadores más ... ¿atrevidos?...¿mejor preparados?...¿que más saben? Bueno, por muchos esquiadores. El debate iría para largo...

Lo que sí es cierto es que somos ahora muchos los que practicamos freeride o esquí fuera de pista. Incluso se está popularizando cada vez más el esquí fuera de estación o, al menos, en un entorno de la estación al que no se llega por remontes mecánicos.

Afortunadamente para todos, la evolución de los nuevos materiales, sobre todo de los esquís anchos y el rocker, ha ayudado a popularizar una práctica antes reservada para esquiadores muy expertos. Ahora, por suerte, el material ayuda mucho más, ya no solo por el rocker y resto de cotas del esquí, también la ligereza, la proliferación de fijaciones cada más adecuadas para la subida, la ropa, las botas... Digamos que las marcas no son ajenas a nuestros gustos y nos generan necesidades (ojo, con nuestro consentimiento). Nosotros, por supuesto, estamos encantados de dejarnos seducir y no hay buen esquiador que no sueñe con ese material tan espectacular que ha visto en las redes sociales.

Las estaciones

Las estaciones, las buenas estaciones, se están adaptando a las nuevas necesidades de los esquiadores y, después de unos años de observación, van tomando iniciativas.

Esta temporada Grandvalira inaugura el Grandvalira Adventure Center, un centro de aventuras ubicado en los sectores de Soldeu y El Tarter. La idea del nuevo centro es cubrir las necesidades de los esquiadores que buscan practicar heliesquí, freeride, freetouring y backcountry, tanto en el dominio esquiable como en el entorno natural de la estación. Todo ello con la seguridad de poder practicarlo con profesores y guías de montaña especializados.

Con motivo de la inauguración del Grandvalira Adventure Center, la estación realizó un concurso para poder asistir al Snow Safety Camp, que consistió en un fantástico fin de semana que combinaba acción y formación. Así como también, y no menos importante ;-) après-ski, cine, comidas, cena y algunos lujos como el alojamiento en el Mountain Hostel Tarter y unos cuantos mimos más a los participantes. Además, la marca Black Diamond, que puso el aporte logístico y técnico, regaló a cada uno de los participantes una estupenda mochila para llevar cómodamente el equipo de seguridad.

Snow Safety Camp

Aunque la acción comenzaría el sábado 1 de febrero, el viernes por la tarde noche ya iba a empezar un fin de semana trepidante. La recepción en el Mountain Hostel Tarter por parte de los equipos de Black Diamond y Grandvalira fue muy cordial. Ya tenía el placer de conocer a la mayoría de los miembros de los equipos de ambas entidades y también a algunos de los participantes en el campus, con lo cual fue un rato de encuentros y de alegrías. Contento de volver a verlos a todos y de conocer a los que serían mis nuevos compañeros al menos por un fin de semana.

El sábado por la mañana asistimos a un excelente desayuno en L'Abarset, conocido por todos como lugar más importante del après-ski andorrano, es también un restaurante en el que se come, y desayuna, de maravilla. Tanto en invierno como durante la mayor parte del verano. Allí nos recibieron parte de los equipos de la escuela de esquí y de marketing, con Toni Rodríguez y David Ledesma a la cabeza.

undefined

Acción

Ya sabéis cómo funciona esto. Dicen que vamos a hacer la primera bajada para evaluar el nivel del grupo y automáticamente tu cuerpo se rigidiza y las articulaciones se tensan haciéndote esquiar como Mazinger Z (para los más jóvenes, Mazinger Z es el robot más fuerte y valiente que ha existido).

Aún con la presión inicial, desde el primer momento estuvimos muy cómodos. El nivel de esquí de los participantes era muy alto, casi me sentí un poco acomplejado, pero ganas no me iban a faltar. Al final los grupos se dividieron más por intereses. En un lado iban a ir los que querían un poco más de actividad montañera, con Jonatan Larrañaga, guía de alta montaña y David Parra, profesor del Grandvalira Adventure Center y en el otro los que preferíamos enfocar el curso al freeride, con Alex Martín y Marc Toralles, como profesor y guía respectivamente.

undefined
undefined
undefined
undefined

La canal ancha de Encampadana fue la zona de pruebas y un poco más abajo, pero todavía en la zona de Encampadana haríamos la primera bajada digamos formativa. Ya con los consejos de Alex y Marc. Desde el principio dando mucha y buena información, tanto a nivel de esquí como de conocimiento del terreno.

Pasamos, y se hizo muy corta, una gran mañana de esquí. El tándem formado por Alex y Marc nos regaló una jornada amena y gratificante en el terreno del esquí puramente hablando y muy didáctica y educativa en el aspecto formativo. Y solo acabábamos de empezar.

Al otro grupo tampoco le había ido nada mal. Yo había tenido a David Parra ya de profesor de freeride (aquí el reportaje), y sabía que les iba a ir muy bien. Y Jonatan Larrañaga, después de la primera charla ya te das cuenta que le gusta explicar bien las cosas y que es un experto en su materia.

Formación

Tras la comida, qué bien sienta comer bien tras una buena mañana de esquí, tendríamos un importante mini curso de formación en el uso de arva, pala y sonda. Como sabéis, los elementos indispensables a la hora de comenzar un rescate después de una avalancha.

undefined
undefined
undefined
undefined

La tarde se pasó en un suspiro, se hizo tan corta como la última bajada del día por la pista Àliga. Ya os he dicho cómo esquían los compañeros, pues os podéis imaginar la última bajada. Sobre todo pensando que en el Hostel nos esperaba la piscina y que íbamos justos de tiempo para ver Manaslu, una impresionante película de alpinismo, en el Palau de Gel de Canillo.

undefined

Cena y a la cama.

No me voy a extender, cenamos de maravilla. La organización no escatimó en mimos hacia nosotros y desayuno, comida y cena estuvieron a la altura del resto del camp. ¡Sensacional!

undefined
undefined
undefined
undefined

Como es normal, después de la cena, y siendo sábado por la noche, lo lógico era darse un paseo para bajar la cena por algún local de Soldeu o incluso tomarse algún digestivo. Pero, y sin que sirva de precedente, estábamos tan cansados que nos fuimos a dormir. Y no tanto pensando en el día que terminaba como en el que tenía que empezar en 6 o 7 horas. Uno de los platos fuertes estaba por llegar.

Freeride de nuevo

El domingo se nos abría la posibilidad de hacer unas bajadas por las zonas en las que Grandvalira ha instalado unas puertas de entrada. Si los remontes que te llevan a esas puertas están abiertos quiere decir que la zona está controlada y se considera segura, antes que tú habrán pasado los pisters y todo estará en orden.

La duda que se nos planteaba era si después remontaríamos de nuevo foqueando o si podríamos usar una ratrack que la estación ponía a nuestro servicio. ¿Qué opción pensáis que ganó? Pues sí, como os digo Grandvalira no escatimó en recursos.

undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined

El sol salió, la nieve se reblandeció un poquito y tuvimos una mañana de lujo. Hasta escandalosa podría decir. La primera bajada con la nieve todavía durita pero receptiva (dura pero receptiva suena un poco raro, pero seguro que ya me entendéis), brutal. ¡BRU-TAL!

undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined

Después el ascenso con la ratrack, que yo no había hecho nunca, y que me encantó. Para pasar a una segunda bajada todavía mejor que la primera, porque la nieve se estaba poniendo cremita y estaba en ese momento en el que es muy agradecida. De nuevo subida para hacer la última bajada en la zona con una nieve ya más transformada, pero todavía en un estado excelente. Subida en ratrack de nuevo y cambio de zona. Se dice en ocasiones, y yo creo que sin razón, que Grandvalira no tiene buenas zonas de freeride. Y, sin embargo, se pueden encontrar y son excelentes. El que se hayan habilitado estas nuevas puertas creo que facilita la experiencia y te da más sensación de seguridad, sobre todo para aquellas personas que no conozcan la estación a fondo.

undefined
undefined
undefined
undefined

Aprender freeride sin miedo

Si hasta ese momento estaba totalmente dentro de mi zona de confort y disfrutando de un día plácido de esquí con esquiadores de nivel, material de primera, comodidades a tope y todo lo que puedas desear para un día de esquí... Alex nos llevó a una pala que se sitúa, de momento, como una o puede que la más, vertical que he esquiado yo fuera de pista. Con entrada secreta, no os puedo decir dónde está porque tendría que mataros después. A partir de ahora la quiero para mí. Sí, no sé si se dice congoja o acojone, un poco tuve, pero también es verdad que con un guía y un profesor a tu lado todo es más fácil y lo haces sin miedo. La podía haber bajado mucho mejor, pero de momento me conformo con haberla bajado. Ahí está y habrá más días.

Y otra más, y también buena y a comer.

undefined
undefined

Formación otra vez

De nuevo íbamos a tener un buen rato de formación por la tarde. Y muy interesante. Nos quedaba la práctica con el arva y organizar un pequeño rescate. Y, aunque quizás no fue el rato más divertido, y eso que nos lo pasamos muy bien, en mi opinión fue el más importante. Aprender a rescatar a otros, pero también que otros sean capaces de rescatarte a ti, es la clave para poder practicar freeride con seguridad. Y si no no lo harás. Olvídate. O sabes usar arva, pala y sonda o no eres un buen freerider, puede que esquíes bien fuera de pista, pero nada más. E incluso muy bien, y que seas un crack, pero que esquíes bien no quiere decir que seas un buen esquiador.

undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined
undefined

Tras el momento caótico de la avalancha debe prevalecer la cordura, que seguro que no es fácil, e intentar hacer las cosas como te han enseñado. El tiempo pasa muy deprisa y hay personas enterradas en la nieve. ¿Podrías ayudarles sin material y sin formación? ¿Avisas por teléfono? Sí, pero debajo de ese montón de nieve hay una persona sin respirar y ya lleva dos minutos, enseguida tres, después cuatro. ¿Cuánto aguantas tú sin respirar? Hasta en la búsqueda de prácticas de una mochila con un arva enterrado te pones nervioso...

Resumen

El camp fue fantástico, sin ninguna duda el mejor al que he asistido hasta el momento. Muy bien planificado, buenos formadores, amenos, materia interesante... Y, sobre todo, un grupo muy agradable, de muy buen nivel de esquí pero también muy majos. Una convivencia no solo fácil, sino divertida e interesante.

Hay que agradecer a todas las partes implicadas su entusiasmo y buen hacer. Las cosas se pueden hacer bien o muy bien. Y, en este caso, se hicieron muy bien. Desde el primer momento hasta el último.

Reflexión

Estamos en una época en la que las cosas van muy deprisa. Nos dejamos llevar por lo que vemos en las redes sociales sin pensar, en ocasiones, que detrás de esas imágenes hay muchísimas horas de experiencia y de formación previa.

Es muy buena idea que las estaciones pongan los medios, pero mucho mejor todavía que nosotros los utilicemos. Aprender paso a paso, con seguridad y responsabilidad depende de cada uno. Un buen equipo de seguridad cuesta la mitad o menos que unos buenos esquís de freeride, aprender a usarlo una mañana. Y, si contratas los servicios de un profesor o un buen guía de montaña, vas a disfrutar mucho más, porque vas a aprender y vas a tener en cuenta peligros que no sabías ni que existían. El freeride conlleva muchos más peligros que el esquí de pista, tratemos de minimizarlos.

undefined
undefined
undefined
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...