Cuando vemos vídeos e imágenes de alpinistas que alcanzan grandes cumbres, las vistas que tienen desde las alturas son sobrecogedoras.
Sin embargo, en muchas ocasiones también puede llegar a entristecernos si nosotros no tenemos la capacidad de alcanzarlas porque nuestros conocimientos y habilidades no son aptos.
Pero no siempre tiene que ser así. Los teleféricos, y otros medios de transporte, tienen el poder de llevarnos hasta la cima del mundo y, si bien hay cumbres que posiblemente jamás podremos alcanzar si no es por medios propios, sí hay otras que pueden ser accesibles para la mayoría de nosotros gracias a los teleféricos.
Para aquellos que soñáis con disfrutar de esas vistas maravillosas, pero pensabais que nunca podríais lograrlo, aquí os dejamos 6 grandes cimas de los Alpes y Pirineos a las que se puede llegar sin problemas gracias a remontes.
6 grandes cimas para llegar en teleférico
Gracias al telecabina Matterhorn Express, que puede cogerse en Zermatt (Alpes suizos), es posible subir hasta los 3.883 metros de altitud, donde se encuentra la estación de montaña más alta de Europa. Desde allí, puede cogerse el ascensor de la cumbre que lleva hasta una plataforma con vistas panorámicas 360º desde donde se pueden observar 38 gigantes de los Alpes.
La Aiguille du Midi es un paraíso para esquiadores, pero también para cualquier amante de la montaña, y un sueño para aquellos que quieran alcanzar grandes cimas pero lo tengan difícil por medios propios.
Saliendo desde el centro de Chamonix (Alpes franceses), el teleférico de la Aiguille du Midi lleva a los viajeros hasta las puertas de la montaña en apenas 20 minutos y, una vez arriba, se puede acceder con ascensor a la terraza de la cima a 3.842 metros y admirar como nunca antes el Mont Blanc.
Si sois valientes, no os perdáis el paso al vacío, una caja de cristal acristalada por 5 lados situada sobre una caída de 1.000 metros.
El ferrocarril del Jungfrau, inaugurado en 1912 ofrece uno de los viajes en tren cremallera más impresionantes que podáis imaginar, partiendo de Interlaken o Grindelwald, y que sube durante todo el año hasta el Jungfraujoch (Alpes suizos).
Desde Grindelwald también puede tomarse el Eiger Express (un telecabina tricable) para llegar a la estación Eiger Glacier en tan solo 15 minutos.
En la cima, a 3.454 metros, el paisaje alpino de nieve, hielo y rocas os dejará sin aliento.
Quizá a alguno se le escapase el nombre del glaciar, pero seguramente seáis muchos los que conocéis La Grave, el paraíso del freeride de los Alpes franceses y también uno de los pueblos más bonitos del país vecino.
Desde el municipio de La grave se puede coger un teleférico que lleva a los visitantes hasta 3.200 metros de altitud, a los pies del glaciar de Girose.
Si por algún motivo no se desea subir hasta arriba, como el teleférico está dividido en dos tramos se puede bajar en la primera estación a 2.400 metros.
Gracias al Titlis Rotair, el primer teleférico giratorio del mundo, la experiencia de subir a la cima del Titlis, a 3.020 metros, es casi una experiencia de otro mundo.
Durante la subida la cabina va girando sobre si misma, lo que te permite tener una panorámica total del paisaje sin tener que moverte de tu sitio.
Esta cabina sale de la parada intermedia de Stand y cubre los últimos 600 metros hasta la cima del Titlis. El viaje completo comienza en Engelberg y se realiza en el Titlis Xpress hasta la parada intermedia.
No todas la grandes cimas, experiencias de alta montaña y teleféricos los encontramos en los Alpes. Los Pirineos también tienen son una cordillera espectacular y con grandes cimas que tienen vistas maravillosas para ofrecernos.
El observatorio que se encuentra en la cima del Pic du Midi (Pirineos franceses), a 2.877 metros de altitud, es uno de esos casos. Y lo mejor es que también se puede llegar hasta allí en remonte mecánico, en este caso con un teleférico que parte desde la estación de esquí.