Suerte que las salomon 557 dan para mucho, pues pude subir la puntera hasta que mi bota con suela Gripwalk encajara perfectamente en ella y mis rodillas quedaran fuera de peligro por lo menos aparentemente. Eso sí, con medio punto menos en la dureza, aún a costa de perder un esquí en algún momento, pero por suerte, no pasó nada de esto.
También hubo que adelantar la puntera dos centímetros para que mis 28.5 cm de bota entraran en la fijación sin tener que desmontar la talonera, por lo que esperaba que estos pequeños viradores de 175cm girarían muy bien.
Además, quedaban como a mí me gusta estéticamente, con las fijaciones bien centraditas en vez de en centro bota, que parece que se caen del esquí.

Para los que no lo conozcáis, la serie VR de Dynamic, que comenzó con los VR7, fue ganadora de múltiples medallas de copa del mundo y olímpicas, especialmente recordada la del slalom especial de Paquito en Sapporo 72 con los VR17 SL.
Me ha sido imposible hasta hoy conseguir un par de VR17s, ya que los pocos que hay no suelen «dejarse» a nadie y menos a alguien que va a intentar usarlos y exprimirlos a tope. ¡¡¡Son reliquias!!! Tuve que conformarme con unos VR27 SL de 1988 a la espera que algún día pueda probar unos VR17.
El par que me llegó para esta prueba, amablemente cedido por un ex corredor de la época, estaba muy entero. La suela solo tenía un par de agujeros pequeños que enseguida pude solventar y una buena encerada después, estaban ya preparados. Lo único que hice a los cantos fue «matar» las espátulas y las colas para no irme al suelo a las primeras de cambio por si acaso. Los cantos en general estaban «usados», es decir, no se habían hecho en mucho tiempo y por las condiciones de primavera, no me preocupé mucho de ellos.

A primera hora de la mañana, en pistas, la cosa prometía. No hacía frio y la nieve iba a ser blandita durante toda la mañana por lo que dejé de preocuparme por los cantos y disfrutar de lo que tenía en los pies…
El esquí era absolutamente estrecho, mucho, y en apariencia algo corto, lo que esperaba notar en la pista, si bien para mi sorpresa, no fue un problema.
El secreto fue aclimatarse a ellos, llevarlos como ellos quieren, no como tú quieres esquiarlos en 2021, si no como ellos eran esquiados hace 33 años, cuando eran TOP gama.
Fue lo más importante para que todo fuera bien y no hubiera sustos, como cuando en alguna curva a alta velocidad intenté conducir como hoy en día y el esquí siguió absolutamente recto y mi cuerpo estaba yéndose a la nieve.
Rectificar rápidamente posiciones encima de los esquís fue importantísimo para no llevarme el premió a la caída del día. ¡Aprendí rápidamente a no hacer «modernidades»!
VR27 SL… Como su nombre indica, el esquí giraba, y ¡vaya cómo giraba!. Intuitivamente los haces ir por donde quieres, sin problema alguno. Giran donde, como y cuando quieras, en corto, en largo, en muy corto, welden o giro medio y largo muy bien apoyado al 80% en el esquí exterior.
En los schuss se comportaron muy bien a alta velocidad y, a pesar de parecer algo cortos, me llevaron a alta velocidad con mucho aplomo, sin sustos. Fueron absolutamente predecibles, con un margen de error increíble, y acabé la jornada muy sorprendido de no haber ido al suelo ni una sola vez por culpa de «un interior.»
La única vez que no los pude esquiar y eché muy en falta no haber hecho cantos, fue cuando el entrenador del club local me dio permiso para bajar por el slalom de entreno de los niños del club.
Uno de ellos me explicó el trazado desde arriba, hasta la décima puerta más o menos, para saber lo que venía por delante y unas risas más tarde salí como si no hubiera un mañana. Solo duré cuatro puertas pues, en el muro, el hielo me llevó fuera de línea, trazada y casi de la pista. Ahí sí que la falta de cantos fue absolutamente patente. Risas de los niños y el coach y me despedí de ellos dando por acabada lo que fue una gran jornada de «pruebas».
La nieve cremita del día me ayudó mucho, pues hizo que toda la jornada fuera muy agradable, sin sustos, sin mucha gente y con buena compañía y teniendo como guía a Ferran, uno de los míticos locals de Port del Comte, quien conoce la estación como si fuera el pasillo de su casa, lo que da un plus importante a la hora de adentrarte en la cremita del fuera pistas. ¡Gracias Ferrán!
Me voy satisfecho, es un súper esquí y no entiendo aún cómo los hemos dejado arrinconados en los garajes… Yo voy a volver a usarlo seguro, pero eso sí, ¡¡¡con los cantos recién hechos y a 88º!!!
Buena iniciativa. Tengo pendiente un día sacar las reliquias a pasear. Solo por ver cómo esquiábamos antes.
jajajaja, antes esquiábamos mejor que ahora! Probablemente mas lentos, pero creo que teníamos una técnica a prueba de bomba!!!
¿¿Debate abierto??
Comentad lo que queráis!
Reto: ¿Seríais capaces, alguno de vosotros, de explicar, de forma breve y clara, qué cambiáis en vuestra posición, fuerzas y movimientos en el momento de poneros unos esquís así.
Insisto: BREVE
Esquí alternativo.
Peso en el exterior al 75/80 %
Peso en el interior al 25/20 %
No conducir si no entrar en el viraje y dejar que derrapen un poco de atrás.
Cuerpo y brazos igual que ahora.
Bien explicado, pero ¿Como explicarías la diferencia entre «entrar en el viraje» y «conducir»?
Lo de «dejar que derrapen» es lo que mejor me saldría a mi, ja ja ja!
En breve:
Entrar en el viraje con la técnica extensión-flexión.
Aquí un poco de vídeo al estilo de lo que te dice Friki:
https://www.nevasport.com/ferranpow/art/60449/retro-ski-en-epoca-actual/
Qué grande Friki!! Cómo hacías girar esas lanzas!! Un gusto verte con ellas y esquiar contigo!
Repetiremos!!
Gracias Ferrán! un placer!