El esquí es un deporte que requiere un esfuerzo físico considerable. Por lo tanto, sin importar si somos esquiadores profesionales o si nos dedicamos a él como pasatiempo, es muy importante mantener una dieta adecuada si queremos tener un buen rendimiento.
Por este motivo, hemos pensado que podrían ser útiles estos consejos de alimentación, tanto para antes de ir a esquiar, como para cuando estamos en pistas y después de practicar esquí.
Qué comer antes de ir a esquiar
Los esquiadores debemos intentar mantener una dieta que contenga suficientes hidratos de carbono. Esto se debe a que los carbohidratos funcionan como combustible para esquiar por lo que, si queremos sacar nuestro máximo rendimiento y aguantar todo el día, tenemos que darle al cuerpo una cantidad suficiente de estos compuestos.
Por eso, unos días antes de practicar esquí, es recomendable que consumamos pastas, arroz, patatas, pavo, conejo y/o pollo. Desde luego, también deberemos comer frutas y verduras para darle a nuestro cuerpo las vitaminas y minerales que necesita para soportar los esfuerzos físicos del deporte.
Eso a cuanto a los días previos, pero el mismo día también debemos tener en cuenta ciertas consideraciones.
Lo más común es ir a esquiar bien temprano por la mañana y tenemos que estar preparados para el desgaste energético que tendrá nuestro cuerpo. En este sentido, lo más recomendable es que por la mañana, antes de ir a pistas, nos tomemos un desayuno nutritivo.
Además de una taza de té o café, tendremos que complementar nuestro desayuno con frutas, zumo de naranja, tostadas, queso y/o fiambre... En definitiva, alimentos que nos proporcionen energía para comenzar a esquiar.
Durante y después de practicar esquí
Muchas veces es difícil calcular cuánto tiempo pasaremos en las pistas de esquí. Por eso, los especialistas recomiendan que llevemos pequeños bocadillos o tentempiés que podamos comer cada hora u hora y media.
Un buen ejemplo de alimentos que podemos consumir cuando empecemos a notar cierto cansancio esquiando pueden ser los frutos secos, barritas energéticas, frutas deshidratadas y los plátanos.
Desde luego, también es fundamental mantenernos hidratados en todo momento porque esquiando se pierden muchos líquidos y tenemos que reponerlos. Para conseguirlo, tendremos que beber agua o alguna bebida deportiva al menos cada 20 o 30 minutos, aun cuando no tengamos sed.
Al terminar nuestra sesión de esquí, lo importante es reponer todos los nutrientes que hayamos perdido. En este sentido, los complementos alimenticios de HSN nos darán la energía que necesitamos para recuperarnos. Pero aun así, es importante que nuestra cena sea abundante.
De nuevo tendremos que consumir hidratos de carbono para recuperar los que habremos perdido y, además, agregar proteínas y grasas. Las pastas y el arroz son fundamentales para reponer carbohidratos, y podemos consumir verduras, huevos, pescado y carne para incorporar las grasas y proteínas que necesitamos para que el cuerpo se recupere más rápido.