Ahora que llega el buen tiempo, una experiencia maravillosa para los amantes de la naturaleza es dormir bajo las estrellas.
Es el momento ideal para sacar nuestras tiendas de campaña y disfrutar de unos días de acampada ya sea en familia, con amigos, en pareja o incluso en solitario -siempre tomando las medidas de precaución necesarias y avisando de nuestro destino-.
Sin embargo, esos momentos tan idílicos durante el día y en los ratos contemplativos de la noche, se pueden transformar en un dolor de cabeza cuando ya queremos dejarnos vencer por el sueño, especialmente cuando no se está acostumbrado.
Aunque no tenemos una barita mágica para tener dulces sueños, lo que sí podemos hacer es ofrecerte unos consejos para dormir mejor de acampada.
Consejos para dormir mejor en tienda de campaña
1. Vigilar comidas y bebidas
De hecho, este consejo puede sernos útil para dormir mejor en cualquier lugar. El alcohol y otras bebidas con demasiado gas, azúcar o energéticas, pueden alterarnos de forma que nos cueste más conciliar el sueño.
Lo mismo ocurre con comidas demasiado copiosas, picantes o con exceso de azúcar. Además de activarnos, pueden h
acer que la digestión sea pesada y, por lo tanto, no nos dejarán dormir bien.
Por otro lado, también es mejor evitar beber demasiada agua antes de ir a dormir y así intentar evitar que nos entren ganas de orinar durante la noche, despertándonos.
2. Ventilar la tienda de campaña
Especialmente si el clima es húmedo durante el día, el vapor de agua podría condensarse dentro de la tienda cuando baje la temperatura. Ventilar la tienda por la parte superior ayudará a evitar la condensación del interior.
Algunos modelos cuentan con rejillas de ventilación que permiten mantener la tienda ventilada también por la noche sin perder la protección que ofrece contra la lluvia.
3. De camping, elegir bien la parcela
En el caso por decantarnos por un camping y no acampada libre, elegir bien dónde instalaremos nuestra tienda es primordial, especialmente si viajamos en épocas de alta afluencia.
Ponernos cerca de los baños, del bar, restaurante o cualquier otro local de ocio que pueda tener el camping, puede parecernos muy cómodo pero también es más fácil que haya un continuo movimiento de gente cerca de nuestra tienda, también por la noche.
Si conocemos el lugar, quizá también sepamos los lugares clave en los que los jóvenes acostumbran a reunirse durante la noche. Si es así, ¡evitémoslos! Y si no, siempre podemos preguntar.
El secreto está en intentar adelantarnos a situaciones como estas y evitarlas.
4. No dejarnos la almohada
Cuando vamos de hotel o a casa de algún conocido siempre tenemos alguna almohada para pasar la noche. Pero incluso en esas circunstancias es fácil que pasemos mala noche porque no sea de nuestro gusto.
Imaginaos entonces si vamos de acampada y tenemos que dormir sin almohada y sobre el suelo si no llevamos colchón hinchable. Lo más seguro es que nos cueste pegar ojo y que al día siguiente nos levantemos con dolor con cuello, lo que podría estropearnos todo el día.
5. Las maravillas del colchón hinchable
Puede parecer exagerado pero puede ser un elemento clave para conciliar el sueño, especialmente si tenemos problemas de espalda -algo que no está reñido con querer disfrutar de la naturaleza-.
Además, los hay realmente ligeros y que ocupan muy poco espacio, tanto como el saco -aunque estos sí pueden ser más caros y finos-. Hoy en día el mercado está lleno de modelos diferentes. No es difícil encontrar uno que encaje con nuestras preferencias y presupuesto.
6. Mantener el horario
Sabemos que estando de vacaciones es bastante difícil; nos cuesta mantenerlo incluso los días que pasamos en casa.
Pero en la medida de los posible, mantener nuestro horario habitual de cena e ir a dormir nos ayudará mucho pues es a lo que nuestro cuerpo está acostumbrado.
7. Evitar las historias de miedo
Si tenéis una imagen cinematográfica de vuestra escapada, contar historias de terror alrededor de un fuego -eso para las películas- quemando nubes de azúcar (malvaviscos) es todo un clásico de las acampadas.
¡Y puede llegar a ser muy divertido! Mientras estéis todos reunidos. Pero cuando llega el momento de separarse e irse a la tienda, es fácil que os entren los temores, especialmente si estáis practicando acampada libre y no sentís la seguridad de un camping y de tener más gente cerca.
Cantar, los juegos de palabras, contar historietas personales y alegres… También puede ser muy divertido y no da miedo.
8. Un momento de relax antes de ir a dormir
Cuando nos vamos de escapada es fácil que estemos “excitados”, emocionados. ¡Es completamente normal! Eso significa que estamos disfrutando.
Sin embargo, irse a la cama en ese estado no nos ayudará a dormir bien y al día siguiente podríamos estar incluso más cansados que cuando nos fuimos a dormir.
Tomarse un tiempo de relajación antes de ir a dormir, relajar nuestro cuerpo y mente practicando un poco de yoga o meditación nos puede ayudar mucho.
9. Los sonidos de la naturaleza no siempre ayudan
A muchos nos relaja escuchar correr el agua de un río o la brisa del aire entre los árboles, pero no siempre es así. Además, aunque nos parezca silenciosa comparada con la ciudad, la naturaleza también está llena de ruidos -o ruiditos- que por la noche pueden llegar a asustarnos si no estamos acostumbrados.
Si ya prevés que el tuyo puede ser uno de estos casos, llevar contigo un ventilador que funcione con baterías, un reproductor de música, o incluso una máquina de ruido blanco (que ayuda a cancelar el ruido ambiente) te ayudará mucho a conciliar el sueño.
