6 meses y un día. Esto es lo que ha pasado desde que el 1 de noviembre Masella pusiera en marcha sus instalaciones. Más de medio año disfrutando del deporte que más nos gusta. Pero como todo lo bueno, llega el momento del final, toca despedirse y empezar a pensar en otras cosas. Porque tras 181 días haciéndolo, mañana ya no habrá ningún remonte a las 9 de la mañana dispuesto a subirnos a lo más alto de la Tosa.
Pero no nos desanimemos tan deprisa. Es 1 de mayo y hoy toca despedir esto como se merece, que por algo es la temporada más larga que hemos vivido nunca. Sí, muy pocas estaciones del mundo pueden presumir de haber estado más de medio año abiertas y nosotros tenemos una aquí, al lado de casa.
Un grupo de amigos siempre cerramos la temporada con una bajada en bañador. Pues bien, en esta ocasión lanzamos una convocatoria un poco más seria y la gente ha respondido. Los de siempre, aquellos que sabes que siempre están. Y junto a ellos, los amigos de otras estaciones que ya no podían esquiar y también muchos desconocidos que no se han querer un día como este. Total, que nos hemos juntado unos cuantos con ganas de pasarlo bien y a juzgar por el ambiente que había al acabar, estábamos todos más alegres que tristes.
El día más triste del año, cuando toca despedirse de toda esa gente que sólo nos vemos en pistas, cuando sabes que no te vas a volver a calzar unos esquís en meses, cuando la alternativa que te queda se llama playa, cuando toca pasar calor... se ha convertido en un gran día. Algo me dice que esta tradición de la bajada en bañador ha llegado para quedarse y dejará de ser para un reducto de cuatro amigos.
Y nada mejor que unas imágenes de cómo ha ido el día:
Pues nada, ahora a asimilar que se han acabado por unos meses esos mensajes del tipo "hoy toca GS" o "estoy en el Jet" que tanta vidilla dan los fines de semana. Y mientras a empezar a pensar en la temporada que viene. Lo bueno, que Masella ya ha anunciado que abrirá el primer día de noviembre que se pueda... Ya podemos poner el contador en marcha, que mañana ya tendrá un día menos. ¡Empieza la cuenta atrás!