¿Qué tal queridos amigos? ¿Cómo estáis llevando estos calores ahora que ya estamos en pleno verano? La verdad es que no logro desconectar del todo de las ganas de nieve y montaña. Es verdad que ahora ya está difícil el poder esquiar, aunque me consta que todavía hay gente que lo está haciendo en la Península, pero no se me quitan las ganas de dar un buen paseo por la montaña disfrutando de la Naturaleza, con mayúsculas, y también viendo cómo se van las últimas nieves que quedan en nuestras montañas.
El pasado fin de semana estuvimos disfrutando de un paseo familiar. Es cierto que hacía muy buen día para ir a la playa, pero ¿para qué vas a ir a la playa si puedes disfrutar de la montaña? Estuvimos en una zona que nos gusta mucha, que son los Lagos de Tristaina, en Ordino-Arcalís. Una zona preciosa y muy asequible aunque vayas con niños. Ahora ya son un poco mayores, pero también habíamos hecho la misma ruta cuando eran más pequeños.
Andar por la montaña, sin duda, tiene muchos beneficios a nivel físico, pero, en mi opinión, el mayor de todos es el beneficio que nos aporta psicológicamente: te da paz. Descansas. Es como si tomaras aire, de hecho respiras aire puro de verdad, y se te hiciera un “reset”, como se dice ahora, cargándote de energía positiva para continuar una semana más con tus actividades diarias.
Pronto comenzaremos la etapa más dura para el esquiador, que es la del verano duro y puro, aunque también lo disfrutamos mucho, ¡cómo no! Pero hasta entonces seguiremos disfrutando de la montaña y cogiendo fuerzas para la gran travesía del desierto. Por cierto, que no hace mucho también estuvimos en la playa jajajaja, aquí os dejo unas fotos y un video muy corto.
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Un saludo amigos, en breve nos vemos de nuevo aquí. Intentaremos que el verano sea ameno.