Octubre es un mes de cuenta atrás. Ya quedan pocas semanas para el inicio de la temporada y las estaciones de esquí inician las pruebas de carga de los telesillas. Es el caso de La Molina, donde a finales de semana estaban realizando las pruebas de arranque, carga y parada del telesilla Cap de Comella.
Si se cumplen las previsiones, entre el 25 de noviembre y el 4 de diciembre La Molina iniciará su temporada 2021-22. Así lo han confirmado desde FGC, que ya ha empezado a comercializar los forfaits de la nueva campaña de invierno de sus estaciones.
Quizá en menos de 35 días ya podamos deslizarnos por las pistas, de ahí que todos los centros invernales se encuentren durante estos días realizando las últimas comprobaciones para dejarlo todo listo.
¿Qué son las pruebas de carga?
Las pruebas de carga es una operación que consiste en poner cargas, en forma de sacos llenos de agua, en cada una de las sillas. A continuación se hacen las comprobaciones de peso, velocidad, parada y puesta en marcha del motor de emergencia. A pesar de que en el caso de la estación de La Molina las pruebas se hacen con sacas que se llenan de agua, en otras estaciones se hacen con bidones. En cualquier caso, sacas o bidones, el peso de estos debe ser el equivalente al peso del número de personas que puede transportar cada silla.
¿Cuándo se hacen estas pruebas?
Las pruebas de carga se suelen hacer una vez ha finalizado la revisión técnica a la que se somete cada remonte, una revisión que debe hacerse en relación de los años que la instalación lleva en funcionamiento. Este es un requisito necesario para recibir el permiso para su funcionamiento. Lo habitual es hacerlo a pocos días o semanas del inicio de la temporada.
¿Para qué se hacen las pruebas de carga?
Todos los funiculares, teleféricos, telecabinas, telesillas y telesquís deben pasar revisiones periódicas para recibir la autorización administrativa de explotación. En el caso de los remontes por arrastre no hay que hacer prueba de carga, ya que el esquiador está en contacto directo con el suelo y requiere menos pruebas de peso.
Con este tipo de mantenimiento se pueden prevenir accidentes como el que sucedió hace tres inviernos en una estación de esquí georgiana. Muchos lectores deben recordar lo que pasó en Gudauri, cuando un telesilla se puso en modo marcha atrás a toda velocidad provocando varios heridos.
