Una muestra más de hasta qué punto debemos cuidar el medioambiente para evitar o disminuir los efectos del cambio climático se ha hecho patente en los últimos días.
La estación de esquí de Canadá, Holiday Mountain Resort anunciaba este lunes en sus redes sociales que permanecerán cerrados la próxima temporada por falta de agua.
El comunicado decía lo siguiente: “Las condiciones de sequía sin precedentes que han afectado al sur de Manitoba han impactado significativamente la fuente de agua que usa el resort para hacer nieve. Sin la capacidad de producir nieve, el Resort no puede abrir”.
La estación se abastecía del agua del río Pembina para la producción de nieve pero, lamentablemente, el nivel del rio es mucho más bajo que el año pasado.
A pesar de que algunos seguidores comentaban que anunciar una decisión de tal calibre les parecía precipitado estando aún a principios de agosto, y que quizá podrían esperar a otoño a ver si el caudal se recuperaba, el resort explicaba que su permiso para la fabricación de nieve es de 17 millos de galones (más de 64 millones de litros) y que no será posible que tenga la suficiente agua.
Además, especificaban que “se necesitan meses de mantenimiento y preparación para prepararse para la temporada de esquí. Cientos de miles de dólares en trabajos de elevación, pruebas e inspecciones. Normalmente ya vendemos pases en agosto y con la situación actual, sería increíblemente irresponsable venderlos cuando no podemos garantizar un producto”.
Ha tenido que ser una decisión difícil para estación, que está operativa desde diciembre de 1959. Sin embargo, no tiran la toalla y esto no significa el cierre definitivo pues también adelantaban que “esperamos veros a todos en diciembre de 2022”.
Esperamos que así sea, por el futuro de la estación, del esquí Manitoba y, por encima de todo, porque significaría que el cauce del río ha vuelto a la “normalidad”.