Parecen conceptos completamente antagónicos, ¿cierto? ¿Alguna vez os habríais imaginado a un esquiador en el Dakar?
Ahora ya sí, porque hay un freestyler y un loco por el esquí que ha decidido dar el salto, a lo grande, a una disciplina completamente diferente.
Javi Vega, uno de los riders del test de Solo Nieve, cambiará el 6 de enero los esquís por una moto.
Y no lo hará con discreción, no. Javi y su compañera, Sara García, se lanzan al Rally Raid más duro del mundo.
Pero además, por si la experiencia fuese poco excitante, lo harán sin asistencia, en la categoría “malles moto”.
Para aquellos que andéis un poco perdidos en esto del Dakar, los pilotos solo podrán recibir ayuda de su compañero. Además, todo lo que necesiten para el Raid (herramientas, piezas de repuesto, ropa…) deberá caber en un baúl de 80 litros que les transportará la organización junto con una tienda de campaña y un juego de ruedas completo.
Su objetivo, hacer historia y que Sara se convierta en la primera mujer que acaba el Dakar en esa categoría.
Por suerte, Javi Vega contará con su pareja Sara García, pues la piloto lleva más de 10 años inmersa en el mundo de los rallys. Ha participado en el Raid Desert Trophy, como única participante femenina en moto. En 2016, se convirtió en la primera mujer que finalizaba el Intercontinental Rally, y además quedó séptima. En 2017 fue primera de la categoría femenina en la Baja Aragón.
Pero lo más curioso o peculiar de este equipo es que, a diferencia de la mayor parte (por no decir totalidad) de participantes del Dakar, ellos entrenan a su manera, aunando sus dos grandes pasiones: las motos y el esquí.
Para ir calentando motores ambos pilotos realizaron una exhibición sobre sus motos en Madrid Snowzone, que no vamos a dejar que os perdáis.