Es espectacular, nos pone los pelos de punta y nos llama constantemente desde la distancia para que vayamos a probarla. Pero sus cantos son como los de una sirena, difíciles de resistir pero muy peligrosos. Así es Streif, el exigente, atractivo e infernal descenso de Kitzbühel.
De hecho, incluso en sueños es fácil que se convierta en una pesadilla. Porque no hace falta estar allí bajando a más de 100 km/h para saber que es necesaria una técnica, fuerza y resistencia sublime para afrontarlo.
Incluso así, siendo uno o una de las mejores esquiadoras del mundo, se puede cometer un ínfimo error que no solo te lleve a perder esa carrera, sino que puede cambiar por completo tu vida, si no acaba con ella.
Suena duro, pero el descenso es un deporte de riesgo, de alto riesgo, y quien lo practica lo asume. Forma parte de la mentalidad competitiva, del deportista.
La película Streif, que podéis ver completa en Red Bull TV, nos muestra ese exigente descenso desde dentro, sus entrañas. Lo exigente que es con la organización, con la preparación de pista, con los deportistas...
No todo es tan simple como parece por la tele, ni por supuesto tan "fácil". Un error puede acabar en una terrible caída que nos impacte durante unos segundos. Pero posiblemente pronto estemos pensando ya en otro corredor.
Pero puede no ser así para quien la ha sufrido. Sus consecuencias pueden ir muchísimo más allá, y eso no se ve.
Hasta ahora, porque la película Streif nos muestra todo aquello que no podíamos ver del infernal descenso de Kitzbühel.