Impermeabilidad y transpirabilidad, todo lo que necesitas saber

Impermeabilidad y transpirabilidad, todo lo que necesitas saber

Aunque parezcan términos opuestos para nosotros, deportistas amantes de la naturaleza y actividades al aire libre, lo cierto es que impermeabilidad y transpirabilidad son dos conceptos que están muy unidos.

Sin embargo, en muchas ocasiones no sabemos realmente qué es lo que estamos comprando o no comprendemos la información técnica que nos proporcionan las marcas sobre las prendas.

Por eso, hoy vamos a responder algunas preguntas sobre impermeabilidad y transpirabilidad. Para que cuando vayamos a comprar esa prenda que dicen que es imprescindible, sepamos qué es lo que estamos comprando y si realmente es lo que necesitamos.

Preguntas y respuestas sobre impermeabilidad y transpirabilidad

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Si bien os acabamos de decir que impermeabilidad y transpirabilidad van muy unidas, la relación que tienen la una con la otra cuando hablamos de ropa suele ser inversamente proporcional.

Es decir, a más impermeabilidad las prendas suelen ofrecer menos transpirabilidad, y a la inversa; a menor impermeabilidad, mayor transpirabilidad.

Por eso, aunque vayan unidas, debemos saber a qué se refiere cada uno de estos conceptos.

Cuando hablamos de ropa, lo cierto es que encontrar una prenda que responda completamente al término impermeabilidad, que bajo ningún concepto deje pasar el agua y sea 100% impermeable, es prácticamente imposible. Por eso, es habitual referirse a esa característica como resistencia al agua.

Aunque sobre las medidas os hablaremos a continuación, os adelantamos que, al hablar de ropa de montaña, es habitual considerar impermeable una prenda a partir de 10.000 mm de columna de agua.

Sin embargo, en otros deportes y situaciones, una prenda ya suele considerarse impermeable a partir de 2.500 mm.

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Eso ocurre porque las circunstancias que se viven o se pueden llegar a vivir en la montaña (la presión añadida, vientos fuertes...) hacen que la prenda requiera una mayor resistencia al agua para ofrecer la efectividad del laboratorio.

Para conocer la resistencia al agua que ofrece un tejido lo más habitual es realizar una prueba de presión hidrostática para calcular cuánto aguanta el tejido antes de que el agua lo traspase.

El tejido se coloca bien tensado en el extremo de un tubo (marcado milimétricamente) y se va añadiendo agua. Cuando el agua empieza a atravesar el tejido, es que éste ha llegado a su límite de resistencia al agua.

La cantidad de agua (en milímetros) que se haya echado en el tubo antes de que el tejido empezase a gotear, nos dice la columna de agua.

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Dependiendo de la actividad que vayáis a realizar en cada momento y, sobre todo el dónde y cuándo (por la climatología), determinará el grado de impermeabilidad que podáis necesitar.

Para que hagáis una idea, aquí os desgranamos qué es capaz de resistir un tejido según los datos de la columna de agua.

De 0 a 5.000 mm: Resistencia no muy alta. Lluvia ligera, nieve seca…

De 6.000 a 10.000 mm: Lluvia y/o nevada moderada.

De 11.000 a 15000 mm: Lluvia de moderada a fuerte y/o nevada fuerte.

De 16.000 a 20.000 mm: Lluvias muy fuertes, tormentas intensas de nieve…

+20.000 mm: Protección extrema.

Ahora bien, como os decíamos al inicio, recordad que impermeabilidad y transpirabilidad suelen ser inversamente proporcionales. Por lo tanto, si vais a realizar una actividad muy aeróbica y exigente al aire libre, deberéis buscar el equilibrio entre ambas características.

Para ello, es importante que también sepáis ver e identificar el nivel de transpirabilidad de una prenda.

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Si la impermeabilidad hacía referencia a la cualidad de una prenda de no dejar pasar agua, la transpirabilidad es la capacidad que esa prenda tiene de expulsar la humedad interior.

Y no se trata de evitar sudar o no dejar manchas de sudor en una camiseta. La relevancia de la transpirabilidad va mucho más allá pues puede ser clave a la hora autoregular nuestra temperatura.

Cuando hacemos ejercicio nuestro organismo tiende a calentarse y a sudar y nuestro propio calor convierte ese sudor en vapor, bajando nuestra temperatura corporal.

Las prendas transpirables permiten expulsar ese vapor, y que ese proceso siga en marcha. Sin embargo, si llevamos ropa no transpirable, se impide la correcta evaporación, arriesgándonos a un sobrecaliento que también pueden llevarnos a la deshidratación y luego a un enfriamiento repentino.

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Aquí tendréis que estar más atentos pues no hay unanimidad a nivel mundial y se usan diferentes métodos para calcularla.

En Europa la transpirabilidad se regula según el test sweating guarded-hotplate, establecido por los laboratorios Hohenstein y que se ha convertido en norma Europea (ISO 11092 y EN 31092) ya que permite una comparativa eficaz entre marcas y tejidos.

Este procedimiento mide la transpirabilidad en número RET -Resistencia Téxtil a la Evaporación- que se expresa en m2/pa/w. Cuanto menor sea el número RET, mayor es la transpirabilidad de la prenda en cuestión.

La siguiente tabla realizada por el Instituto Hohenstein os ayudará a saber el nivel de transpirabilidad de la prenda según su número RET.

RET 0-6: Extremadamente transpirable, confort con actividades de alta intensidad.

RET 6-13: Muy transpirable, confort con actividades de intensidad media.

RET 13-20: Transpirable, confort en actividades de baja intensidad.

RET 20-30: Transpirabilidad mínima.

RET 30+: No transpirable.

En Estados Unidos, en cambio, usan varios métodos. Por eso, también podríais encontraros alguna prenda que mida la transpirabilidad en MVP (Moisture Vapor Permeability).

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Expresada en gr/m2/24horas, esta cifra nos dice la cantidad de humedad que la prenda es capaz de expulsar. Como con la impermeabilidad, cuanto mayor es el número mayor es la transpirabilidad.

Sin embargo, parece ser un método no tan reconocido ya que el resultado depende mucho de las condiciones en las que se ha realizado la prueba y esa es una información que las marcas no suelen dar.

Con esto, esperamos haberos ayudado a comprender un poco mejor los términos y mediciones de las prendas impermeables y transpirables, y sobre todo que os sea de utilidad cuando vayáis a adquirir una nueva prenda.

Si todavía os quedan dudas, o si podéis aportarnos más información, estaremos encantados de intentar ayudaros y de leeros.  

Fotografía de portada: Kanenori

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