Puede que seas un pro. Puede que primemos las prestaciones de una bota por encima de otras cosas. Pero también hay un gran número de esquiadores que buscan confort. Quieren comodidad no solo esquiando, también caminando y a la hora de calzarse y descalzarse.
Con esta idea, Nordica ha introducido este invierno el concepto Hands Free, una bota dirigida especialmente a los esquiadores sénior –que representan entre un 7 % y un 8 % en Europa–. Muchos de ellos quieren evitar la incomodidad habitual en el momento de ponerse y quitarse las botas.

A todos ellos, y a algún esquiador más, van dirigidas las botas de esquí Nordica HF 110 GW de esta prueba, con las que tuvimos una rápida toma de contacto en la estación de La Molina, a quien desde aquí queremos agradecer las facilidades dadas.
Sobre el papel
La facilidad de calzado es la gran razón de ser de esta bota. Su propio nombre así lo indica: hands free, manos libres. Para ello, la firma italiana recupera el antiguo concepto de entrada posterior en un modelo totalmente nuevo.
La HF 110 tiene solo dos cierres, ambos con ajuste micrométrico: uno en el empeine y otro en la parte trasera de la caña. Su diseño dispone de dos ejes de pivote, uno en los maléolos y otro adicional en la parte delantera inferior de la caña, para conseguir un movimiento más natural y una mejor transmisión.
Destaca la incorporación de un botín completo –cuando se popularizó la bota posterior en los 90 no era así– Custom Cork Liner, que se puede personalizar en apenas cinco minutos. No obstante, la HF 110 también se puede utilizar sin termoformar el botín, es decir que están listas para esquiar sin necesidad de pasar por el boot fitter.
De mantener los pies calientes se encarga el aislamiento Primaloft. Por último, aunque en la caja encontramos un juego de suelas normales, monta de origen el nuevo standard GripWalk –con la firma de Michelin– que proporcionan mayor comodidad y seguridad al andar.
Sobre la nieve
Nordica cumple lo que promete con la HF 110 GW. Bastará con que las abras (permite hasta 40º) para calzártelas sin utilizar las manos. Los pies entran sin esfuerzo, como un guante, detalle que agradecerán tanto los séniors como los esquiadores menos avezados.
Ni siquiera para ajustarla es necesario agacharse, pues el cierre del empeine no se toca una vez lo hemos regulado a nuestro gusto y el cierre trasero se puede bloquear pisando con la otra bota o con la punta del bastón.
El GripWalk aporta un plus de seguridad en cuanto a agarre y comodidad al caminar por suelo pavimentado o por la nieve.
Una vez en pistas, la primera sensación fue rara, no lo vamos a negar. Talón algo libre, pie algo suelto y menos capacidad de transmisión de lo que estamos acostumbrados. Normal, es una bota con una horma de 102 mm y un empeine alto, en busca de ese plus de confort.
Tras un par de bajadas para que el botín se fuera amoldando, apretamos a full los cierres buscando una mejor sujeción. Todo empezaba a estar en su sitio: buena transmisión, flexión más firme de lo esperado y una precisión más que correcta sin sacrificar confort.
En suma, la HF 110 destiló muy buenas sensaciones, siempre sin olvidar para qué y para quién ha sido desarrollada: para un esquiador, sobre todo sénior, que busca una mayor facilidad de calzado y un compromiso en el que prima el confort, pero con unas prestaciones muy correctas.
Como referencia, el pasado invierno Nordica vendió más de 4.000 pares solo en Austria, antes de la pandemia. Y en Austria algo saben de esquí, ¿no?
Lo que más nos gusta y lo que menos…
A favor: Facilidad de calzado, comodidad, ajuste de los cierres, suelas GripWalk y el compromiso confort/prestaciones.
En contra: Las prestaciones a ritmo elevado.
Ficha técnica de las Nordica HF 110 GW

Tecnología: Hands Free Step In & Out, termoformado por infrarrojos, aislamiento Primaloft, Double Axis Pivot, ajuste de volumen IVC, cierre Monoblock, suelas GripWalk Michelin.
Horma: 102 mm
Flex: 110
tallas: 24-31
Peso: 1.760 g (26,5)
Precio: 470 euros.
Distribuye: BM Sportech
Más información en la web de la marca.