Sin duda, en este episodio 5 de The Fifty, Cody Townsend se enfrenta en el Monte Currie (Columbia Británica) al reto más difícil de los 50 por el momento.
En esta ocasión no solo salen de noche, la noche los atrapa aún descendiendo y complicando aún más bajar esquiando.
Fueron más de 9 horas de ascenso, y ya durante las subida pudieron comprobar que las cosas se pondrían serias. Iban preparados, por supuesto, pero en esta ocasión incluso necesitaron arneses.
De hecho, el descenso en sí ya comenzaba haciendo rappel con los esquís. ¡Podéis imaginaros hasta que punto se complica la cosa!
Pero eso no es todo. Además de la fuerte pendiente, el Monte Currie es un bosque gigante con el que deben luchar en la oscuridad con apenas unos frontales y los esquís puestos.
No es de extrañar que, después de haber pasado una década de inviernos en Pemberton (pueblo ubicado a las faldas del Mt Currie), Cody jamás haya ascendido y descendido por sus laderas. Hasta ahora.
Cierto es que al llegar a la cima se encuentran con trazadas de otros esquiadores que les han adelantado gracias al heliski. Pero no es lo mismo. Cody Townsend se lanza a una aventura épica con Jon Johnston y Chris Ruben que les lleva todo un día para acabar exhaustos pero llenos de alegría.