Mala noticia. La norteamericana Lindsey Vonn ha sufrido una caída mientras estaba entrenando el descenso en la estación de Cooper Mountain. Por desgracia, la cuatro veces ganadora de la general de la Copa del Mundo de Esquí Alpino, se ha golpeado su rodilla operada, y ha tenido que ser auxiliada y ha sido trasladada de inmediato al hospital, donde le están examinando su rodilla derecha. La esquiadora de Vail ha podido dejar el estadio donde estaban compitiendo, pero ha precisado de ayuda para poder hacerlo.
Recordemos que Lindsey se anunció el pasado mes de agosto que pensaba volver a competir en la Copa del Mundo en Beaver Creek y que ya tuvo su primer contacto con los esquís y la nieve en Portillo, Chile; después de que en el pasado Mundial de Schladming, concretamente en la carrera del súper gigante, se destrozara la rodilla.
Precisamente, ella misma realizaba un post en su muro de Facebook tras el primer día de entrenar el descenso: «El primer día de entrenamiento del descenso ha sido un éxito. Lo he pasado de maravilla y estoy muy contenta de poder volver a entrenar mi disciplina favorita. Mi rodilla ha respondido muy bien y espero poder seguir entrenando mañana e ir más rápido».
El parte médico
Un día después, desde el equipo norteamericano de esquí ya daban un diagnóstico: a consecuencia de la caída Lindsey Vonn sufría una distensión leve en la rodilla derecha, un esguince parcial del ligamento cruzado anterior derecho, abrasiones faciles leves y diferentes contusiones. Tras este parte médico, Kyle Wilkens, director del equipo médico del equipo norteamericano de esquí alpino, explica que Vonn se tomará unos días de descanso antes de seguir con su terapia física. En función de cómo responda, se determinará el rgreso de Lindsey a las pistas. Desde Solo Nieve, sólo podemos desearle una pronta recuperación a la gran campeona.
Yo, empezaría a pensar en hacer sólo slalom y gigante. Por minimizar riesgos. Ya ha demostrado al mundo que en la pruebas de velocidad es casi imbatible.